Hoy os presentamos un precioso libro autobiográfico de Asha Miró, «La hija del Ganges».
Lo leí en aquella eterna espera en mi primer proceso de adopción. Todo libro que olía a adopción caía en mis manos y «La hija del Ganges» fue un de ellos.
Al leerlo podía ponerme en la piel de Asha. Este libro es un relato autobiográfico sobre su adopción y sobre cómo, ya adulta, vuelve a su tierra, la India, en busca de sus raíces.
Además incluye palabras del diario de la madre adoptiva de Asha. Podemos entender los temores, las dudas y el amor de unos padres que aquí en España esperaban a una niña, y que luego tuvieron que guiar sus primeros pasos en un mundo y una cultural totalmente nuevos para ella.
Antes de ser adoptada, cada día en el orfanato, Asha subía las escaleras de caracol a pedir unos padres. Y años más tarde, con una familia en Barcelona, volvía a subir esas mismas escaleras en busca de respuestas que le han permitido construir y contar su historia.
Es cierto que lo leí hace catorce años y desde entonces mi aprendizaje como madre adoptiva ha sido constante. Entonces lo leía con la sed de una futura madre adoptiva que tiene miedos, inquietudes, incógnitas… Y me encantó ver entre la fotos que aporta Asha en su libro, esos ojos tan vivos y despiertos y esa sonrisa tan llena de ilusión y felicidad de una niña con un sueño que vio cumplido.
Hoy ya como madre de dos hijos adoptados en Vietnam y con otras preocupaciones en mi cabeza, este libro me conecta además con dos heridas. La herida del sentimiento de abandono de las personas adoptadas, esa herida tan profunda y a la vez tan invisible y dolorosa y con la herida en la identidad por la pérdida de las raíces biológicas.
Hoy, habiendo profundizado mucho más en todo esto, entiendo la búsqueda de sus orígenes como una necesidad humana. La identidad y esta búsqueda de orígenes son derechos fundamentales y y por ello usarlos es siempre una opción que tienen que tener nuestros hijos.
Me recuerda también la necesidad de valorar lo que les pasó antes y después de llegar a ser adoptados. No olvidemos nunca que existe un trauma previo o posterior a la adopción y es fundamental aceptar y acompañarles para que puedan superar la herida que provocó su adopción.
Os recomiendo que leáis «La hija del Ganges» y después «Las dos caras de la luna» donde Asha Miró nos narra su segundo viaje a la India y todo lo que conlleva que no os puedo desvelar ahora…
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